El mundo secreto de las calabacitas
La calabaza tierna es consumida como verdura, cuando está madura se utiliza principalmente la pulpa y, en ciertos casos, la cáscara sirve como recipiente. Base de nuestra gastronomía, fundamental en preparaciones como tortillas, tamales y atoles. Nutriente esencial y acompañante tradicional en la mesa mexicana. Usada en una gran variedad de platillos como cremas, calabazas asadas y bocadillos. Alimento sagrado de los pueblos originarios, destacado por su valor proteico.
Características de la calabacita
Siempre aparecen primero las flores masculinas, que a diferencia de las flores femeninas, tienen un tallo largo y delgado. Los pétalos de todas sus flores son de color amarillo anaranjado. Las calabacitas se comen todavía inmaduras; por lo general son de color verde claro, aunque existen algunas más
Cómo sembrar la calabacita
Temperatura de más de 15ºC, aunque lo óptimo sería de más de 22. Para el desarrollo de la planta, el rango debe ir de 18 a 25ºC. No tolera las heladas. Cuando la temperatura es fresca y los días son cortos, se forman más flores femeninas. Prospera en cualquier tipo de suelo, pero prefieren los terrenos profundos, ricos en materia orgánica. La calabacita se siembra generalmente de manera directa, es decir, con semillas. Para ello se necesitarán de cuatro a seis kilos de semilla por hectárea. Hay que dejar una distancia de un metro entre cada surco y de 45 centímetros a un metro entre cada planta.
Cuidados esenciales de la calabacita
Para cuidar la calabacita de forma adecuada, es importante regarla regularmente, especialmente cuando las calabacitas pequeñas empiezan a formarse, asegurando que reciba al menos 2.54 cm de agua por semana. También se debe asegurar que la planta reciba suficiente luz solar, ya que las calabazas necesitan pleno sol para un crecimiento óptimo. Mantener el suelo libre de malas hierbas y asegurarse de que esté bien drenado es otro aspecto importante.
Cosecha y almacenamiento
Coseche las calabazas de invierno y las calabazas cortando el tallo con unas tijeras de podar o un cuchillo afilado. Si el tallo se desprende de la fruta, la vida útil disminuirá. Las calabazas en invierno deben curarse antes de guardarlas. El curado es un proceso en el que la cáscara de la fruta se endurece, lo que permite una vida útil más prolongada. Los zapallos y las calabazas se pueden curar al aire libre si hace calor (~ 80-90 °F); se pronostican días sin lluvia en el momento de la cosecha. Simplemente corte la fruta del resto de la planta y déjela reposar en el campo o jardín durante 7 a 10 días, o hasta que las muescas y los pequeños cortes formen costras. Las calabazas de invierno y las calabazas deben almacenarse a una humedad relativa del 50 % y entre 50 y 55 °F. Pueden durar de 1 a 6 meses en almacenamiento, dependiendo de la variedad.