Betabel

El betabel es un gran aliado contra el cáncer

El betabel, conocido también como remolacha, es una hortaliza rica en vitamina A, betalaína, carotenoides y flavonoides, que son antioxidantes que combaten el exceso de radicales libres en el organismo, previniendo daños en las células sanas y ayudando en la protección contra el cáncer y algunas enfermedades crónicas. Además, el betabel también proporciona excelentes cantidades de óxido nítrico al organismo, una sustancia que promueve la relajación de los vasos sanguíneos, facilitando la circulación sanguínea y ayudando así a controlar la presión arterial y a mejorar el rendimiento durante los entrenamientos

Características del betabel

El betabel es un tubérculo u hortaliza de raíz gruesa, de color púrpura intenso debido a la betacianina y con forma de bulbo. Pertenece a la familia de las amarantáceas y se consume crudo o cocido en jugos, licuados, ensaladas y postres. Además de su sabor dulce, el betabel es rico en vitamina A, vitamina B1 y B2, minerales, betalaína, carotenoides, flavonoides y óxido nítrico, lo que le confiere propiedades antioxidantes, relajantes, cardioprotectoras, hipotensoras, hepatoprotectoras, anticancerígenas, hipocolesterolemiantes, rejuvenecedoras, neuroprotectoras e inmunitarias

Hojas
Sus hojas tienen un tamaño aproximado de 10 cm de longitud por 5 cm de ancho.
Dichas hojas pueden ser consumidas tanto crudas como cocinadas y son una rica fuente de vitaminas y minerales.
Flores
Sus especiales flores suele ser de color blancuzco con algunas tonalidades purpuras.
Son bastante peculiares y también son ricas fuentes de minerales esenciales.
Raíz
La raíz del betabel se encuentra bajo la tierra y se pueden encontrar diversas variedades.
Son completamente comestibles y de éstas raíces se puede obtener azúcar.
Su forma puede variar entre prolongada o esférica y tanto su color como tamaño también pueden variar.

Como sembrar el betabel

Con estos sencillos pasos podrás sembrar tu betabel, ya sea en una maceta o en un jardín directo al suelo. Te recomendamos darle una mojada antes a tus semillas para que “despierten” antes de ir a la tierra

En maceta:
Usa una maceta de 20 cm de diámetro por 30 cm de profundidad.
Llena la maceta con tierra.
Siembra las semillas por toda la superficie y cúbrelas con 2 cm de tierra y abono.
Cuando las plántulas tengan 2 cm de alto, saca las más débiles, dejando a las más fuertes y deja un espacio de 12 cm entre cada plántula.
En jardín:
El suelo debe estar a una temperatura mayor de 10°C
Prepara el espacio de cultivo, el espacio debe ser soleado y abierto.
En una capa de 3cm de composta casera pon una aplicación de fertilizante orgánico (esto para que tu hortaliza crezca más poderosa)
Selecciona las semillas del tipo de betabel que quieres sembrar
Moja la tierra y coloca las semillas a 4 cm de profundidad con una distancia de 7 cm cada una.
Cuidados del betabel
Mantén las remolachas regadas de manera uniforme para evitar que las raíces se atrofien.
Elige un suelo adecuado, rico en nutrientes y suelto para evitar deformaciones en la raíz.
Siembra el betabel en primavera u otoño en un lugar que reciba luz solar directa.
Proporciona riego frecuente y abundante, evitando encharcamientos y sequedad extrema.
Ten en cuenta las preferencias climáticas del betabel, que prefiere temperaturas templadas y húmedas.

Cosecha y almacenamiento del betabel

Cosecha: Se recomienda cortar las hojas del betabel a 2.5 centímetros por encima de la raíz para asegurar que esta se conserve en óptimas condiciones durante el almacenamiento.

Almacenamiento: El betabel se cosecha durante todo el año, pero principalmente en épocas frías. Puebla es la región donde más se produce este tubérculo en México. Para conservarlo, es importante mantenerlo en un lugar fresco y seco.

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